Detrás de cada "no sé" hay cierta inteligencia, detrás de cada "no me importa" hay cierta emoción y detrás de cada "está bien" hay cierto dolor. Hay que empezar de cero para tocar el cielo. Todo es cuestión de tiempo. Mi corazón no guarda rencor, es imposible odiar a quien una vez me hizo feliz. Porque yo en el amor soy una idiota. Con la frente en alto, que la vida sigue.